"El hombre, por su debilidad, no puede cumplir algunos preceptos con las fuerzas que ahora tiene; pero con la oración puede obtener una ayuda superior a la que se necesita para observarlos. Dios no manda imposibles, sino que, cuando manda, amonesta para que hagamos lo que podamos, pidamos lo que no podamos y ayuda para que podamos. Él nos ayudará a que podamos".San Agustín
(Texto adoptado y declarado dogma de fe en
el Condilio de Trento, Sesión 5, Capítulo 11.)
0 comentarios:
Publicar un comentario